Cada Día
La maldita soledad de las noches silenciosas
La risa inepta del payaso globalizado
El terrorista infecundo detrás de las negras telarañas
Nuestra artificialidad que se deslumbra en instituciones borrascosas
Ocho días después y el humo de cuerpos calcinados
todavía despide un olor cónsone con holocausto
Ocho años después y las grietas yacen cubiertas de asfalto
Mi potencial desecho ante la inseguridad de mi dios del mañana
El cual no regresa y se aleja y se disuelve en tenue neblina
Y solo me queda el disfraz controvertido de la sociedad cerebral
De la inocente mentira que es la libertad
Del envejecimiento que roba toda inocencia
Pero por el distanciamiento perpetuo de relaciones
Distorsionan percepciones y nos aíslan de reacciones individuales
Y privan de sentimientos pasionales
mientras nos condicionan a la indiferencia
La doble inseguridad del que cierra sus ojos en la noche
Sabiendo que su corazón parará en cualquier momento
Sabiendo que el paraíso está desecho
Porque no cabe en los parámetros de la imaginación